La tortura de la esperanza

Portret Kobiety- Axentowicz Teodor
Fluía el riachuelo de lo que ayer fue,
fluía la voz que rezaba tu retornar,
mientras danzaba yo en el  verde jugar
de tus luces de amor… Nos hacíamos
tiempo, al pasar sin  mayor atención
cuando la ciudad mascullaba su salmo responsorial.

Pero si tus manos enlazaran la luna-noche-gris
de tus ausencias, la gris calle que retorna a ti,
por qué buscar sin descansar, si  tu sombra
no ha de venir.  Si recordar el recorrer de los
pétalos de tu falda no basta para acallar
la furia de tu voz sobre mía: el rumor incesante
de tu mirar sobre mi almohada.

La lluvia que nos hace jóvenes al andar
sobre la tierra descalza del Este, pero no
a volar sobre tus coronas del sur, misteriosa
y silenciosa en el farol que carcome oscuridad
te convertirás ¿Pero por qué no volvió tu recuerdo
a crepitar por mi calle antes de tus mares abandonar?

Si nuestro pasado rejuveneciera de sus libros,
así las nubes de octubre, tu pecho, volverían a cubrir
de gélidos silencios, nos haríamos otra vez
hermanos en el secreto, dueños de la
charla y el café y del atisbar de tus labios
la cereza antes de ofrecerte mi corazón.

 Ya no es necesario pedir espacios,
el amanecer colorea la lluvia y
La tortura de la esperanza vuelve
a hacer su maquinaría a andar…


Comentarios

Entradas populares