Una mirada al panorama político social

Figuras abstractas de una mujer

La campaña política va convirtiéndose cada vez más en un esperpento que al parecer será difícil de controlar si la sociedad civil no pone en claro cuáles son los temas a tocar, cómo se deben de tratar y adónde llevará las medidas adoptadas para solucionar la problemática del país en la medida que nuestro deber está en proporcionar la defensa- como ciudadanos responsables- de nuestros intereses como país, porque es finalmente el progreso o el retroceso recaerá sobre todos los ciudadanos del Perú. La responsabilidad es bastante grande- como es sabido por todos- pero cómo podemos viabilizar que este recaiga con seguridad en las manos de nuevo gobierno, la respuesta parece contundente: a través de la elección democrática de nuestra autoridades; pese a que la baraja política ofrezca un panorama similar, existen aún posibilidades de cambio real y propuestas que pueden ser más interesantes que el de las clásicas postulaciones que van desde Toledo hasta la propuesta de Humala.

El panorama político no ha tenido diversos matices, lamentablemente parece de una manera intempestiva a favor de la campaña con sabor a tecno-cumbia y actividades casi propias de la farándula nacional y es que hoy por hoy la campaña política parece reducirse a esos espacios donde el electorado elige, o pretende elegir, a sus autoridades por medios como la simpatía o el hecho de acercamiento con lo popular. Es bastante sesgado pensar que si uno de los síntomas de la política de hoy sea su individualización o en palabras de un sociólogo consultado por la revista dominical del diario La República: “Hoy la política es individual o sea me interesa en la medida que en que me beneficia a mí y a mi familia ”. Este hecho se configura evidentemente como un marco general para un malestar de la sociedad peruana: la falta de cohesión social, la falta de una visión general de los problemas de todos y del olvido de la idea que mientras más se resuelvan los problemas de todos podremos mejorar la sociedad en conjunto y no sólo mediante la espontanea mejora de un grupo o sector social. Este hecho lo podemos comprobar en cada episodio de la historia peruana donde solo mirábamos individualmente el desarrollo de un grupo o sector social el cual avanzaba olvidando la tremenda responsabilidad que tiene para con los que tienen menos oportunidades de desarrollo. Llevemos la misma fotografía a la comparación de la actual campaña política y encontraremos, a priori, una suerte de candidato representante sólo de un determinado estrato social, como es el caso de vincular la postulación de Castañeda o Pedro Pablo Kuczynsky a estratos altos o a Humala con sectores menos favorecidos dentro de la sociedad .

A pesar de los esfuerzos de crear un clima democrático en el país existe una tremenda duda y preocupación por cómo la política y sus estrategias permiten llevar a cabo que la democracia llegue como institución a todos los ciudadanos; sin embargo, la preocupación parte cuando entendemos que sólo ha llegado al grueso de la población la democracia como procedimiento, pero hasta hoy la democracia como un sistema capaz de integrar a nuestra sociedad, capaz de integrar tanto el mercado y la política de tal suerte que la armonía insertada en el sistema permita convertir a nuestro país en un lugar próspero. Lastimosamente la realidad estadística nos dice otra cosa, pues de acuerdo a los resultados del Latinobarómetro hoy tenemos los niveles más bajos de confianza en los partidos políticos, el congreso y el poder judicial además de la más baja aprobación de la gestión de gobierno en latino américa . Esta situación no mejorará evidentemente si la campaña presidencial toma los matices de un circo político, si no se barrunta la búsqueda de un pacto ético que permita centrar la campaña en propuestas serias y no en artilugios para disfrazar lo importante en una campaña con una sonrisa disforzada. Preocupa también la realidad de las listas congresales, mientras estas sigan siendo armadas en base a los aportes monetarios de los candidatos al parlamento, recibiremos no a gente preparada y con vocación de servicio, sino a cualquier improvisado que solo busca “que la plata llegue sola”.

Otro indicador que preocupa es el siguiente: “somos los más insatisfechos con la situación económica con Guatemala y México y los que menos confiamos en el sector privado y el mercado” . Aquí debo de rescatar varios puntos y es que en el país existe, como bien lo define Adrianzén existe un sisma en el país por una parte un país formal (el que podemos ver en las estadísticas y otros indicadores) y la otra parte el real o informal el cual atraviesa diversos problemas sociales producto del mal manejo económico de la política , y es que la política llevada a cabo por los gobiernos post-Fujimori fueron de corte neoliberal y aplicaron de la acumulación por despojo, caracterizada por “la privatización de con fines de la ganancia de tierras, agua, bosques pero también de biodiversidad, conocimiento local y cultura” las cuales son subastadas a la empresa que detente el mayor poder económico y mediante los permisos que le otorgue el gobierno de turno, esta empresa podrá tomar partida de todos los recursos efectuando un conflicto entre los valores de la comunidad (recordemos que el agua dentro del margen legal tiene una condición de valor económico, social y cultural, además de ancestral en algunas comunidades) y es que la extracción de los recursos naturales en todos los ámbitos de nuestra patria se realizan en zonas de comunidades o donde existe población ancestral y mediante las políticas de Estado se promueve la dación de estas tierras en pro del interés nacional, pero en detrimento de los más pobres , pues estos estratos además de ser los menos beneficiados con la extracción son también los menos educación en cuanto una cultura electoral y por ende con menor posibilidad para acceder a la representación dentro del sistema político. Este sistema se origina finalmente del divorcio que existe entre el Estado y la economía del país.

¿Adónde nos lleva el conjunto de políticas económicas aplicadas? Pues lo cierto es que hoy en día el sistema adoptado por el Estado peruano- intuyo- es erróneo, pues atisbamos que la política económica ha puesto al filo de la navaja a democracia, la cual se siente cada vez más frágil dentro del sentir de las grandes mayorías, pues la llegada de la democracia- como un paquete que incluye la justicia social- no está siendo efectiva en nuestro país, además de la desinformación, del miedo y la incertidumbre de un futuro con democracia, pero sin pan llevan a pensar a los ciudadanos de nuestro país que su vigencia no es necesaria. Este hecho no parte sólo de comprender que la democracia se delimita a ser la presencia de un sistema económico global, sino que el sistema económico de hoy- el del libre mercado- es parte de un paquete del la democracia liberal, pero que sería necesaria retirar o modificar si es que existiese una alteración del poder en la cual este no sea distribuido en cada ciudadano, sino que este se estanque en el poderío del que detenta mayor poder económico . Entonces en el Perú del 2011- es decir en estas elecciones- estamos arriesgando el desarrollo del país su estabilidad y su futuro camino hacia un país con cohesión social o hacia un paraíso de la inversión sin justicia social; todo ello enmarca a la campaña electoral como una de las más importantes y no una campaña donde los mechones de cabello o las “bajadas de mostaza” sean el pan de cada día.

La responsabilidad no sólo nos lleva a compartir un rol bastante analítico en estas elecciones, sino que también se complica, pues no es como Adrianzén lo propone que debe de existir un cambio de sistema y este mágicamente traerá para el país políticos de calidad y una mejora de los indicadores de gestión y de confianza en el gobierno de turno . Pues la mayor parte de los peruanos se encuentra de acuerdo con el sistema político actual, esto lo vemos en el descenso del Humala en la intención de voto además del necesario cambio de discurso al cual se sometió pues la fórmula del antisistema no parece ser la más adecuada para el elector. Si esto es así qué es lo que buscamos los peruanos. Pues me animo a decir que el electorado de hoy busca un candidato capaz de “administrar la economía con la derecha” y “distribuir con la izquierda” vale decir un gobierno que permita el ingreso de las inversiones privadas- siempre y cuando ellas respeten el sistema social y no degraden gravemente los bienes ambientales-, luego distribuir estas ganancias entre los todos de manera equitativa o por lo menos que se busque en el país un conceso para aliviar efectivamente la pobreza extrema en el país, además de un reforma del Estado que le permita llegar a todos por igual con educación, salud y seguridad. Lamentablemente esta tarea parece imposible de realizarse si observamos las postulaciones que están arriba en las encuestas, pues todas ellas representan estilos similares de gobierno, proyectos con una misma base, pero sin una real defensa de los intereses primordiales de las grandes mayorías.

En cuanto a este punto me gustaría recalcar la promulgación de los decretos de urgencia 001 y 002 de 2011 los cuales configuran un clima claro para esquivar procesos tan necesarios para respetar la estabilidad social del país como los son los estudios de impacto ambiental (EIA) cuando se trata de megaproyectos tan “urgentes” como el tren eléctrico, que han sido postergado durante tantos años y hoy finales del gobierno aprista se vuelve de imprescindible necesidad junto con otros 32 proyectos . Frente a estos síntomas de corrupción, frente a la empresa del gobierno actual y de los empresarios irresponsables de cavar un foso en el cual se pretenda enterrar todo rasgo de democracia y de justicia social, por la imposición arbitraria de estrategias que sólo benefician a unos cuantos es que debemos inducir a la campaña política de 2011 a hacia el terreno del debate y de la protección del proyecto país que tenemos, debemos estar atentos, debemos ser responsables al momento de elegir no por uno sino por todos, porque si ayudamos a todos estaremos haciendo de este país un lugar mejor para todos y eso incluye a nosotros.