El Ocaso se pregunta si en la atemporalidad podría perderse en la bruma del amor.

Podría adivinar un "Nos"
en el vergel de tus caderas,
esconderme sutilmente
en el vibrar de tu vientre...
Caminar por el fuego silencioso
de tu ser.

¿Podría dibujar un "Nos"
desde tu universo?
Quizá flores distantes
de tu espalda cubrir mis sentidos.

Rito pagano que esconde la tarde,
Hebe es muda testigo de la belleza de tu piel,
cae el sol sobre tu vientre. Sonrisas...
Labios carmesí preguntando por el no-tiempo
que nos encierra.

¡Miradas al espíritu! Sucumbo ante
tu encanto, respiras con celeridad,
imaginas un secreto, susurras a mi oído "amour".

Melancólica melodía de verano
respirando el recuerdo de tus tiempos,
el jadeo inquebrantable antes de llevarte
la ambrosía de mis labios.

Pienso en un "Nos", expresiones
de la soledad, espejos de agua que
transmiten placer. El mar se lleva
la tarde siempre que halla a un solo
ser perderse en la bruma del amor,
mientras las estrellas danzan y el viento deja tu cabello caer.